Yo estuve allí,
quedé atrapado por la belleza oscura del carbón,
ardía el sol inverso de la mina
en el brocal de unas entrañas arrancadas a pico,
se columpiaba ante mis ojos el gas fantasma del grisú,
nunca llegué a tocar su largo lomo de dragón,
el espinazo sin vértebras ni espinas
que se enroscaba en la gargata como la bufanda de algas
con que regresan los ahogados, los que antes que tú bajaron
en busca del diamante de la antracita pura
y acabaron cegados por su resplandor,
obligados a cobijarse bajo la falda de Perséfone.
Zona B:
El genocida se niega a reconocer el estado palestino, lo cual hace imposible la paz. Es una burla a las continuas resoluciones de la ONU y un pulso al mundo libre. Pero el ególatra USA, que juega con el mundo como con un balón de fultbol le protege, convirtiendo la ley en un felpudo. Habrá que apretar el dogal económico para neutralizar el poder del sionismo. ¡¡¡JUICIO AL GENOCIDA Y A SUS CÓMPLICES!!! ¡¡¡BOICOT AL ESTADO SIONISTA!!!
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