Iba allí
acuciada por una costumbre
que la repetición había enfriado,
tantos días igual, los cuatrocientos pasos
hasta el llamador de bronce, una mano
que agarraba una bola, el ladrido familiar del perro negro
y un cacareo de gallinas que miraban a su delantal,
cuando volvía a casa iba pensando por qué no se atrevió a llamar,
dentro estaba el médico con su cara de inquisidor
del siglo diecisiete y el busto desconchado
de un galeno hecho a navaja con la oreja derecha
más alta que la izquierda y un alfiler de cabeza roja
clavado en el lugar del corazón,
ella iba allí buscando nombre para el temblor del alma
y regresaba siempre con la sensación de haber dejado a un hijo
helándose de amor a la intemperie.
Zona B:
Pensad en esto: ¿qué confianza puede inspirar alguien que convoca a su enemigo a la mesa de negociación y cuando ha logrado atraerlo le asesina y lo proclama como una acción de mérito? Esa es la estrategia del gobierno de Israel que llama terroristas a todos los gazatíes y a cualquier europeo que se atreva a condenar su criminal procedimiento. ¡¡¡JUICIO AL GENOCIDA Y SU GOBIERNO!!! ¡¡¡BOICOT AL ESTADO SIONISTA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario