Es un recuerdo antiguo
ese que guardas de la flor, en la película
la estrujaba una mano, el director de la prisión,
el de los ojos enfermizos, su mano recitaba una oración blasfema,
venía a decir: la sangre de esa flor, quiero beber su sangre,
ese sabor amargo del torturado crisantemo,
me hace un poco menos infeliz ver su deriva
sobre las aguas contaminadas del canal,
me hace sentirme triste pero necesito la tristeza de esa flor
para calmar mi rabia, necesito su sangre, necesito, necesito,
es sólo un recuerdo y no precisa de más explicación,
la voz en off me afecta, me acusa de blasfemo
y yo sólo quise orar, decirle a la pared cuánto daría yo
por una sola gota de sangre blanca, la que mana
de esta primera ausencia, de ese gesto de burla de la sábana
que ni siquiera está arrugada.
Zona B:
Sabemos lo que va a ocurrir. Cada mañana un río de furor arrastra cuerpos denutridos. Llamamoss asesino al asesino y buscaamos nombre para su infinita víctima. Y nos asustamos ante la mirada torva del verdugo, un avispón equipado con odio sobre todo, pero también con armas que le convierten en un grave peligro para la paz. ¡¡¡JUICIO AL GENOCIDA Y SU GOBIERNO!!! ¡¡¡BOICOT AL ESTADO SIONISTA!!!
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