domingo, 4 de noviembre de 2018

Parábola del miedo





El loco
empujaba dulcemente
a las hormigas con su índice
misericordioso.

No veía otro camino
que el que su dedo místico trazaba,
ir a dios es el destino
de los descarriados, se decía
mientras contemplaba el alboroto
del hormiguero, a punto
de armar su propio infierno.

Él le aplicaría la candela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario