A una rueda avanza la moneda
que se somete a ley, a dos el calendario
de los años bisiestos y la carroza del auriga,
a tres la trinidad que no conoce
mujer ni hace ejercicios de calentamiento,
a cuatro el carromato de Tespis, la barraca
de Lorca y el desmayo de las vírgenes necias,
las que se quedaron sin aceite porque decidieron esperar
en vez de ir al encuentro del que reparte subvenciones,
tanta progresión y tanta rueda para aparecer unos segundos
en la superproducción que Hollywood va a dedicarle al pensamiento
(aunque no encuentra productor).
Zona B:
Y buscará algún indicio en el cuero seco de unos rollos conservados y hallará la inspiración en el relato de la destrucción de la Pentápolis. Aunque él siempre vio llover fuego sobre ese territorio. (Profecías laicas)