sábado, 30 de septiembre de 2023

Muchos siglos más tarde alguien trataría con humor aquel carácter pendenciero, haciendo burla del valor con el empleo de una estrofa de pie quebrado; pretendía así poner a Aquiles en el brete de correr tras el rapsoda, con el riesgo de dejar en evidencia la debilidad de su talón y echar por tierra todo el esfuerzo de su madre por prolongar su inmortalidad

 





Le observaba a él, -a sí mismo-, en el espejo,

complexión de atleta, suposiciones anatómicas

de lo que debe ser un héroe,

padecía de luz, con la miopía de los que miran

sin disimulo su reflejo en superficies lisas, 

pared, coraza, escudo, incluso en las hebillas de las grebas,

no le falta valor, se mide con lo mejor, sin competencia,

su espada ya conoce los secretos de los corazones más osados,

entra armado hasta las gradas del altar

e increpa con altivez a las estatuas de los dioses,

quiere saber si existen límites, si es mejor la vertical

del precipicio o la llanura de la playa 

para enfrentarse a su destino con rictus despectivo,

aún sabiendo que la muerte siempre corona al vencedor.

viernes, 29 de septiembre de 2023

Alguna ley, un parlamento regional pulimentando con garlopa esas aristas de lo que nace como estaca y pretender llegar a balaustre, suena a lo lejos la fanfarria que marca los comienzos de la agobiante montería, ladridos, toses y blasfemias de tono menor, que el que esté más cerca mate, o el que tenga el viento de su lado, sin compasión ni veleidades transitorias, que al final todo ha de pagarse

 




Un jabalí,

los cazadores anudaban el cielo agujereado,

no hay rocío capaz de camuflar las huellas en otoño,

las flores ateridas le hablan a él, ¿estás herido?

no te importe manchar de sangre nuestras sábanas,

la luna detergente lo enjabonará, se tenderá la muerte al sol

y las alondras regresarán antes de tiempo

para que nada suene a funeral, únicamente Mozart

sacará sus agujas para costurear los desgarrones,

hablará al final esa trompeta, corno inglés, y cesará el acoso,

la memoria no cuidará de ti, te quedarás muy solo, 

será como si Lázaro se deshiciera de las vendas

y lanzara al aire su gruñido para que todos sepan la verdad.

jueves, 28 de septiembre de 2023

Un cuervo se ha posado sobre los tirantes de la jaima, ha traído el silencio y la negrura del aire pronostica cualquier mal, los animales se contagian de superstición y las ovejas empiezan a ladrar mientras los perros balan, arde el pasto verde con que han sido cebados los pesebres y las cabras se niegan a aportar la leche para el kéfir y la cuajada; podría ser que el hambre volviera a visitarnos

 


                               (Job compra un boleto)


Ahora llega él, el todopoderoso padre

que bendice con su mirada complaciente

lo que ya bendijo dios, viste dalmática de lana

que le hace superior a los demás, él sabe

contentar a dios con humo, duda entre resina y óleo

desnaturalizado, -los dioses sólo comen con los ojos-,

se acomoda con elegante negligencia en la tumbona de marfil

para hacer balance de su patrimonio,

no hay nada como reposar sobre los restos congelados

de una vida animal, mastica una oración de frutos secos,

las uvas malva cuelgan de sus dedos como un anillo arzobispal,

los dátiles de Arabia y el humilde sésamo 

le mantienen a salvo en el oasis fabricado 

                                                         por su poderosa maquinaria, 

se arrodillará sobre damascos para orar: 

tu mal será mi mal, pronuncia, y lo repetirá  sin importarle

que suene a falso, alguien replicará con la blasfemia del temor,

a partir de hoy

no volverá a llover sobre sus campos y todo se tornará ceniza

incluso su peluca negra y su diadema se quedarán en blanco,

hasta su piel se acercará reptando el gusano de la envidia,

le morderá y sus ojos ya no verán a dios

sino el efecto de su terrible amor que colgará a su cuello

una guirnalda de dolor con pústulas y heridas.

miércoles, 27 de septiembre de 2023

Que no bajara más peldaños, que vigilara los testigos de nivel de la inundación, quitar las ramas que impiden el progreso del agua, no estaba equipado para luchar con la riada, sin linterna tras el apagón, sin remo con que dirigir la tabla, era muy peligroso, se arriesgaba al estado de flotación de tantas reses como arrastraba la corriente, pero él no se resignaba, quería saber más

 




Eso es todo

lo que debes hacer, dejar el brazo

como exento de ti, acomodado a la sintaxis

del complicado análisis, buscar la vena,

la oración, la rama, el puño que boquea.

cerrar y abrir, la sangre

fugaz como el mercurio y el deseo

de pasar la página, apriete ahí, el apósito,

la manga y el presagio

que se queda en el tubo de cristal

tras ese código de barras

que se supone que es tu nombre.

martes, 26 de septiembre de 2023

Le han dejado en el asiento que mira al sur, el tren viaja hacia el norte, aún no ha dejado la estación y ve alejándose a quienes eligieron el asiento, mira el cristal con lamparones, la suciedad dibuja formas familiares, la cara de una vaca, la silueta incompleta de un caballo; el tren se pone en marcha, las cosas se deslizan tan deprisa que no le da tiempo ni a nombrarlas, se le amontona el mundo ante los ojos y se le corta la respiración

 




Quería recordar aquel pasaje

en que el enfermo se esforzaba en imitar los movimientos del esguilo,

un chapín doblegado por el uso, acostumbrado a la caricia de los años,

ir y venir, mostrarse y desaparecer, contarle al visitante

las aventuras de una ardilla que no se resignaba a despeñarse

por las hambrunas del invierno,

él lo usaba con la sagaz sabiduría de los solitarios

para conseguir que no se fueran, que aguantaran con él cada peldaño,

cada burbuja hirviente de las horas hasta que la claridad se disipara,

luego, aplacada la ansiedad, el chapín se enroscaba

bajo la cola de plumón y convocaba el mismo sueño:

la afilada brisa de la primavera le curaba

el color amarillento de los ojos y el escozor maleable de la piel,

y acababa vestido con el traje de la primera comunión.


lunes, 25 de septiembre de 2023

Estamos obligados a reconocer esas señales, el olor a humo y a cebolla asada, las acículas del aire trayendo el envoltorio de las ofrendas campesinas de estación, no todo el tiempo va a llevárselo la escuela o la asistencia a interminables novenarios que cubren de morado los últimos reductos de color alegre en el cendal de octubre

 





Saca patatas de la tierra,

arriba luce el sol con escozor de otoño y las saluda 

como si fueran hijas de Perséfone,

se asoman por primera vez a este reino de luces

donde doce dioses entrenan su mirada campesina,

ellas no conocen aún el arrebol del pimentón

ni el desacato de la pizca de sal haciendo hervir el guiso con costilla

que ha preparado Proserpina,

ese fuego de abajo arrebatado al lado hermético del Hades

traerá calor y refrigerio

a los primeros altibajos de los aires de octubre.

domingo, 24 de septiembre de 2023

La facilidad para los cultos depende en cierto modo de las sensaciones que provoca el titular; Anubis levantaba en él una sensualidad helada vinculada al abandono del cadáver sobre las rodillas del chacal; qué confianza puede merecer un merodeador que a veces se alimenta de carroña y suele revestirse con los símbolos de un guardián ambiguo que ni ladra ni gruñe ni recurre para hacerse entender a los sonidos que los humanos conocemos

 




Llegó la muda y avanzó flotando

igual que una madera de naufragio

sobre un rumor de olas, su lenguaje decía que en el mar, 

en el silencio, cualquier sonido provocaba una desesperación

similar a los sueños que no acaban ni con el despertar,

sus manos subían y bajaban con la cadencia de aspas de molino,

arrebatarle al miedo el principal, subir el tono

del gutural esfuerzo, las venas se hinchan y el color dibuja

aunque débilmente una perífrasis verbal,

todo depende de las manos, de la caída de ojos o del ángulo ciego

de nuestra posición, se dice así, supongo, se pronuncia

con la inclinación hipotenusa que configura la palabra,

se muñe en molde como si fuera pan, si sabes

domesticar la levadura verás cómo se crece, remontando

hasta sobrepasar los límites y hacerse perceptible

para cualquier oído.

sábado, 23 de septiembre de 2023

Sólo un alma campesina es capaz de armar ese andamiaje de elevaciones místicas, usando como material únicamente los pigmentos blancos y las fermentadas enseñanzas de los anacoretas que acabarían dando pie a las futuras agrupaciones conventuales y a los excesos de la hagiografía

 





Me enfrento a la pared donde arde la cal, 

su blanca mano zurbarán dibuja monjes en hilera

la verja de la huerta prolonga los faldones blancos de los hábitos,

cómo pintar los oros en este comedor tan sobrio 

o los terciopelos rojos de la tentación en los camastros,

cómo orar de pie volando, rozando plumas de ángel,

cómo vencer la liviandad de la saliva, el recitado

cuaresmal de lo prohibido si se desconoce

el protocolo conventual, -tanto silencio-, y el balbuceo

de un desnutrido gregoriano,  como mucho ese olor

a jabón de lavar y el pobre incienso de-cada-día-dánosle-hoy,

hoy que es día de ayuno y sólo se permite

una mirada furtiva al bodegón de las cerámicas.

viernes, 22 de septiembre de 2023

Bajada lenta por la pendiente, contemplando manchas de color, trígono salvaje entre el arroyo, el retamar, la chimenea volcánica y el geiser secuenciado que de vez en cuando se motiva; llevas en el bolsillo alguna piedra del lugar alto, está prohibido, te lo recuerda el olor a azufre que te dejó en la nariz la última lectura de Dante y su inquietante Beatriz que se negó en redondo a acompañaros

 




Siete días sin ser ni estar,

acaso sea esa la causa de tanta desazón,

los hilos de esa tela del alma avejentada

por lejías y excesos en el cordel del tendedero,

alta como vereda de rebeco

reconfortada con el verde del enebro salvaje

tan pegado a la tierra que se diría terrenal, no fruto

de volanderos arrebatos que lo elevan al sol como si fuera

un tributo a los ídolos locales,

por eso pides hoy que no haga frío, que prosperen las bayas

de fuerte olor azul, que se maceren en alcohol del cuatro, 

y que podáis celebrar el alma y tú, sonámbulos,

un reencuentro entre la bruma perfumada

con la tristeza malva de ese falso azafrán 

que suele coincidir con el adiós de los pastores.

jueves, 21 de septiembre de 2023

Sé más cauto, venteando las presencias conseguirás sentirte menos solo sin necesidad de compañía, captarás la trasparencia a través de abigarradas multitudes, igual que cuando desgranabas una espiga para saber todo el esfuerzo que ha de desplegar el cereal para poblar el páramo de vida

 




Esa coruscante luz recién nacida,

también ellos acaban de nacer,

camada ciega que olfatea el aire espeso,

en la guarida tiembla el miedo, hay oscuridad

y antenas concentrando la sensibilidad en los hocicos,

pero al llegar la madre con la pieza brillando entre los dientes

se hace la luz, no es ese amanecer del cielo

ni la frazada de aire cálido, es su latir, su pelo eléctrico

rozando los costados, 

siempre llega de arriba, de la alta cumbre de la dificultad,

la precaución es esa pata que se posa sin ruido,

la imagen pixelada de la aproximación y la carrera

final hacia una yugular alimenticia,

juego de mesa sin mantel, el hambre evita los cubiertos

y propone un gruñido de satisfacción

que suena igual que una amenaza.


miércoles, 20 de septiembre de 2023

En el pedregal de la bajada se podía escuchar ese lenguaje de arroyo primitivo con que las lascas suelen expresarse, canturreo, bostezo, sumisión, eran hojas de libro con un texto al que nadie prestaba la mínima atención; ese ruido perezoso contenía encriptada toda la información sobre el origen de la cordillera

 





Dale  brocha

a esa piedra verde, que aparezca

la sangre fósil de sus ascendientes

aunque sea a base de pintura, toma ejemplo

de la paciencia con que el tiempo 

trata a la pereza del color, lo deja sin respiración

usando la fiereza pacífica del liquen, ese musgo

de aspecto mendicante que se para a la puerta de las hayas

sin atreverse a entrar, se cuelga de sus ramas

y les contagia su vejez,

la piedra es siempre joven, tan semejante al tiempo

que confunde dureza y duración.




martes, 19 de septiembre de 2023

Se entraba al edificio por un hueco en la pared hecha de libros, los de tapa de piel eran el zócalo, sus lomos relucientes con dorados y estarcidos daban pie a comentarios con un oh de admiración; ya dentro se podía vivir sin respirar, recurriendo a un pasaje de lectura donde se hablaba sin tapujos de la bondad de dios que había hecho el aire con su aliento

 





El nombre de los gatos

se sacaba del santoral, añadiendo a un color sucio

la connivencia de otros dos, es gata, se decía,

la trinidad tintada es femenina aunque se oponga

con sofocada abnegación al dogma,

llueve sobre la vida plana, se convive con la necesidad

que a menudo se trasforma en virtuosa 

a imitación del cardo comestible, se usan de común

las oraciones secundarias con el habla 

impregnada de dios y su latín acalambrado

fuera ya de circulación,

se va a la escuela y se regresa sabio, aunque no feliz,

son los tiempos del santoral profano para gatos

y de historia sagrada en la cocina 

que nos hará crecer como alimañas con collar.


lunes, 18 de septiembre de 2023

Cada año va a beber a aquella fuente y añade un pinchazo en la corteza gris del haya que la acoge, tantos ya como las cuentas de un rosario escarificado en la memoria vegetal de Monteviejo; nadie acude a recordar o poner flores, sólo él y se limita a los pinchazos para que la herida sangre y arrastre los humores negros que siguen flotando por allí

 





Pensó que era una fresa aquel sabor a sangre,

quién iba a decir que el frío del rocío le iba a despertar,

él no era un lagarto de infinitos ojos verdes 

ni el corzo asustadizo ni el pajarillo camuflado

entre las hojas lamidas por el sol, era una caliza más

                                                     empujada al barranco,

hay una memoria pegajosa por la piel que sangra sin heridas

y un cadáver lento en el alero del amanecer,

las balas le dejaron al rebufo de su turbulencia, 

no hicieron blanco aunque persista en sus oídos el rumor de la gracia,

las cuerdas en las manos le han dejado entumecido aquel instante

de fuego y confusión, no hay ángel ni camisa blanca

ni el ansia de correr que impulsa el miedo,

el sol ha levantado, le dice ven, 

abajo quedan los otros doce, inmóviles, callados, 

pirámide sin punta, desmochada del fatal número trece.




domingo, 17 de septiembre de 2023

"En el mejor de los casos la realidad es una corazonada colectiva", dejó escrito en la servilleta; luego la usó para tocarse repetidamente la comisura de los labios, exagerando el gesto cursi y procurando arrugar el papel lo suficiente para que nadie pudiera leer lo que había escrito en ella; y sin más abandonó la mesa mientras murmuraba: deberíamos hacer más caso a las corazonadas

 




Con el renacimiento

los artistas añadieron peso a la flotante creación,

antes el arte se llenaba de volanderas jerarquías 

y ojos grandes para suplir la esclavitud de las miradas,

cabía todo en el pan de oro de la trascendencia bizantina,

sin preguntas, sin profundidad ni perspectiva,

sólo contemplación de un argumentario teologal

resumido en la almendra genésica del verbo,

teología tallada en arenisca a la que el tiempo suavizó los trazos

del cincel adoctrinador, 

ahora flota en el aire el olor animal que nos dejaron 

los alambres de espino al arrancarnos

el místico vellón del paraíso.

sábado, 16 de septiembre de 2023

La contemplación de la papelera llena de hojas arrugadas le hacía sentir bien; tal vez alguna idea brillante acabara así, como algunos días del verano acaban en minúsculo aguacero o en oscuridad rasgada por tímidos relámpagos; del mismo anzuelo que mostrara una lombriz puede acabar colgando una captura capaz de hacer morir de envidia al mismo Hemingway

 




Oigo esa música donde el dolor gotea

como una baba sucia, le dan ese color de cieno

porque saben que triunfa,

gruñe por lo bajo su dolor, se asoma y no saluda

como si algo elemental le avergonzara, 

no es necesario mostrar una exquisita educación

ni estar bien afeitado o parecerse 

a ese retrato apócrifo de niño santo, sólo es preciso

hablar despacio, arrastrar los pies con chanclas

y calcetines arrugados, decir: la vida no me trata

demasiado bien, pero tampoco estoy seguro

de cómo debería ser tratado,

nadie tiene la culpa de este destierro

en el que soy tan infeliz como en cualquier otro territorio.

viernes, 15 de septiembre de 2023

Háblame, que alguna voz siga sonando, que se estremezca el vidrio en el vasar, que no se escuche el rechinar de dientes; háblale, que te siga amando por la voz, que los orvallos de tu ausencia sigan humedeciéndole las manos, que no vaya a dormir sin escucharte, que dure ese sonido hasta que se seque el tuétano del tiempo

 


                                       (durante muchos años fue Revista Comarcal, ahora, 

         con metástasis, decide recluirse, sin una medicina que le de confianza)


En tierras altas fue reguero,

no arroyo montaraz ni río de abundancia,

tuvo vigencia en tiempo seco, dispersó rocío por los valles,

amamantó y acaso hasta redujo seculares hambres,

-suele ser difícil amoldarse a los paisajes de la niebla

cubiertos de crespón y con ribetes de guadamecíes amarillos-,

fue la voz de una memoria correosa, el gregoriano

popular de lo difunto, algo que ya a nadie interesa,

suena a molde vacío, a alfarería sin alfar,

cuando se agote el manantial apenas quedará el barro amarillo 

con huellas muy profundas de las vacas que se acercaban a beber,

y la sed, siempre quedará la sed.

jueves, 14 de septiembre de 2023

Aún se usaba aquel material amarillento que olía de verdad a biblioteca y a ratón; el de la tinta es el olor que más recuerda al funeral, quizá por las esquelas que aparecían siempre sudorosas de exceso y tan escasas de información que podían ser reutilizadas cambiando sólo el nombre

 




Contemplas el paisaje fronterizo, 

calendario de fiestas en octubre, leche otoñal

                                     cansada de proclamas,

rizos de viento y humedad por las alturas coronadas de robles

y el olor al óxido dulzón de manantial,

no te fíes dice el aire rozador en la ventana,

ves lo que quieres ver, muerdes el mango del pincel mientras aguardas

que algo pase a tu lado, la alta luna viene de visita,

busca algo que sin ser estuvo y hoy se ve desde arriba 

                                                                    como yéndose,

pero tú no te dejes ir, que venga del sur el agua,

que florezcan los cirros y las setas

pueblen de vida hipnótica los campos

a punto de cerrar la temporada.

miércoles, 13 de septiembre de 2023

Que no pensara, cualquier receta es válida si su ingrediente principal es la templanza; y la templanza cómo llega, preguntaba él, no pienses, deja que se instale, el reticulermes lucífugus sólo se oye cuando ya está dentro, un polvillo de serrín y esos ruidos nocturnos que pueden confundirse con la respiración de la madera, que como sabes tiene un alma eterna

 




Llegaba en oleadas por los brazos

como el hervor en frío de los nervios,

envoltorio de alambre o calentador de lana por las piernas,

esa caricia desalmada llena de indisciplina 

te hace sentir el nerviosismo de la célula y escarbar con el pensamiento

como si fuera una herramienta de carpintear, virutas,

polvo respirado, angustia de recorrido circular,

no es algo previsible, miedo a estarse quieto

bajo el hormigueo de la plaga, la luz en crudas ráfagas

y por encima de todo, repitiendo el furor de un relincho,

esas crines salvajes de caballo pánico,

sin estruendo de cascos, insidioso, igual que el miedo agazapado.

martes, 12 de septiembre de 2023

El geólogo llegó hasta el Rodabal con una recua de acémilas cargadas de artilugios nunca vistos, un garañón llevaba el teodolito terciado sobre el lomo; él acaparaba la atención por la función desconocida de la herramienta que de algún modo recordaba la crucifixión pagana de los lobos y su exhibición por la comarca para cobrar el "óvolo mellado"

 





La ofrenda es eso, apoyar la desconfianza

en la inestable alfombra de los sueños,

olor a almizcle y al óleo de la unción, qué gratos recuerdos

deja la indigencia, nueces vacías para amenizar la espera,

el compás de la escalera mística, tres banzos cada vez

y arriba una luz vivísima llamando

a cada cosa por su nombre, tú y tú, y tú también

que te camuflas en la sombra,

fuerte es el dolor que no se aplaca con plegarias, 

moscas y sangre seca sobre la piedra del altar

ya desde la primera luz, espabiladas por el olor a acónito,

dispuestas a resistir hasta el final

pues saben que la gula de los dioses deja siempre una cenefa

de hartura y desperdicio.

lunes, 11 de septiembre de 2023

Vuelves del tanatorio sin saber a quién velaban, tocado de humedad como salido de ese mar de ausencias que se organiza en minifundios en torno a un cartelillo con un nombre de recuerdo difícil; sales y ya todo es olvido o calma, ni siquiera inquietud por no saber; se va escribiendo un libro con mensajes, se habla en susurros sin haber enfermos o durmientes a los que pudieras despertar

 




La vida es el relato

del avance del virus, la culminación de su periplo

dentro de nuestros límites,

hasta aquí se llega, dices, y se desata el nudo,

luego piensas: y para qué soltarlo

si el nudo es conjunción, no tregua,

más allá que cada cuerda mida la distancia,

lo que pueda abarcar el pensamiento suspendido 

                                             como luna de invierno,

das miedo ahí, colgado entre la brisa yerta

y la trasparencia del cristal, enfermo de lenguaje

practicado a solas, pensando en algo

que le dirás al enfermero cuando empuje la camilla

hasta la orilla irrenunciable.

domingo, 10 de septiembre de 2023

Encontré interlocutor lanzando piedras planas a caminar sobre el milagro del estanque, logré que respondiera a mis preguntas con un signo final de interrogación haciéndome sentir la quebradiza condición de mis conocimientos; algún día dragarán el fondo saturado de lascas y formarán con ellas el museo de la ignorancia en rebeldía que podrá confrontarse con el de la sabiduría accidental

 





Me rindo a la avaricia desnudadora del invierno,

el hielo no funciona como vestido,

acentúa la desnudez y te hace trasparente hasta la desaparición,

queda el plomo viejo de los meses finales

atiborrados de cansancio, sucios de luz que apenas brilla

salvo en las apuestas de la escarcha,

no dejo de preguntar cómo se mide el tiempo entre carámbanos,

las horas prolongando su pereza desde los aleros,

gota a gota hasta la secular estalactita,

nada que ver con el esfuerzo misericordioso de la nieve

kilométrica y plana que parece

una abstracción difusa de la definición de paraíso.





sábado, 9 de septiembre de 2023

Un castaño joven, se le sacrifica en láminas flexibles, se le deja llorar pero sin lágrima, únicamente para liberar la savia hostil y reducirle a mansedumbre; se convertirá en culo de cesto para llenarse de castañas y completar el ciclo de la dispersión

 




Se oyó decir: la templanza es una tregua amarga, 

se hace en tiempos de abundancia

para dejar en simple aviso las amenazas de la edad,

mira esa lámina renacentista:

los ojos duermen con los párpados abiertos

y un rumor discontinuo sale de ellos

como las líneas analógicas de una definición,

se dice sin necesidad de parlamento lo que se ha de mirar

y a qué distancia han de proyectarse los esfuerzos

recientemente descubiertos de la perspectiva,

sabemos que a toda forma bella se le debe un reconocimiento

pero la mirada se ha de reservar para el prodigio,

para aquello que sin renunciar al ruido de la muchedumbre

prospera sólo en el silencio.

viernes, 8 de septiembre de 2023

Los días impares estaban asignados a la zona oeste, a saber por qué, tal vez acogiéndose a la caída condición de los habitantes de esta antigua región minera que añadía a sus resignados hábitos ese color esclavo de las escombreras que ennegrece el aire y apenas deja libertad para disfrutar con el paisaje

 





Más que fruta vende voz

la furgoneta del frutero, su megáfono

remedia la dependencia de homilías de la zona rural

o la escasez de curas que se encaramen en los púlpitos,

pregona barrio a barrio la perfección formal

de unas piezas insípidas impropiamente conocidas

por nombres no fijados en el antifonario,

lo redondo es de dios, proclama, al igual que lo oblongo

                                                                        y lo alargado,

una explicación: el aire sintético se obtiene por mímesis

en los pulmones blancos de los invernaderos,

nada material los alimenta, la sesiones de música

reducen a proporciones mínimas los grados

                                        de impertinencia y acidez,

si aparece la angustia habrá de ser tomada

como un peldaño más hacia la gracia,

al dar el primer paso sonarán las trompetas

y lloverán manzanas sobre el azufre perfumado

                                                       del apocalipsis,

tan sólo unas monedas os separan 

de la unidad que anuncian los mercados.

jueves, 7 de septiembre de 2023

En todo buen camino rural queda en el centro una hierba vigilada por dos heridas laterales; nadie pisa en ella por comodidad o por miedo a quebrantar un rito; en los cruces en curva se dibuja una rectángulo esquizoide con pretensiones de código QR que los cuadrúpedos debieran aprender a interpretar

 




Algo debió decirle a Edipo

la luz aquella, la que estuvo a punto de anidar

-huevo de cuco- en sus confiadas cuencas

antes de la última tormenta de color, las formas

asomándose al balcón con ánimo suicida,

"el fiero cielo oscuro de febrero"

amenazando con agujas a unos globos colgados en el aire:

se hará de noche y las grajillas

suplirán con ventaja a las pavesas

del permanente incendio que consume la realidad

y tú estarás a salvo en el regazo de la memoria

excluido de la circulación y de cualquier forma de lujuria.

miércoles, 6 de septiembre de 2023

Quedaron en el barro claras huellas de neumáticos y de aceite de motor del que un buen sabueso hubiera podido certificar hasta la marca; pero llovió durante el día, las huellas se borraron y nadie quiso investigar aquel milagro adelantado en varios siglos a las desvergonzadas formas de la modernidad

 




Dícese de aquel famoso bandolero

-aunque de andanzas solitarias- que asoló con su desenvoltura

la costa cántabra de san Vicente, abriendo sucursal volante

en parroquias menores para atender a la logística

y garantizarse la intendencia en las fulgurantes razias

que de vez en cuando desplegaba,

de él se dice que era un miedoso enamorado de la soledad,

que encargaba novenas al capellán de san Andrés

para obtener una crucifixión menos violenta

que la que tuvo el santo,

y aún se añade en la posdata que renunció a su herencia

donándola a un alfoz de la alta Liébana,

tratando de granjearse el beneplácito del monumental cenobio

donde sus padres le dijeron que había sido bautizado.

martes, 5 de septiembre de 2023

Era capaz de leer a Píndaro o a Horacio con soltura y dar cadencia al breve-larga del hexámetro dactílico, los agujeros de la vejez en las paredes los taponaba con maché de hojas de menta, pero de la ventana continuaba saliendo una fragancia musical que los profanos confundían con el parloteo de los pájaros cuando los huevos eclosionaban y caían del nido las cáscaras vacías

 




Al final de la página dejó escrito: 

"todo este vidrio mental", sus manos no se ven, 

mantienen la tensión de la escritura, luchan

contra el espesor de la costumbre

como si esperaran conseguir una victoria sobre el cielo,

para qué un cerebro de materia blanda si la realidad es dura, 

no será mejor triturar el vidrio de la tradición?

aquí estuvo mucho tiempo pero apenas echó raíces,

tuvo miedo de crecer, para eso es necesario hacerse un sitio

suficiente entre espinas,

aún se le recuerda envuelta en lana en el verano,

el reverbero del sudor y los temblores de la voz con fiebre

cuando hacía la salutación a los gorriones

desde la baranda del balcón.

lunes, 4 de septiembre de 2023

Tras lubricar los rodamientos del mecanismo, los empleados del canódromo comprobaron que la liebre era un famoso escritor que pretendía escapar del homenaje al que sus paisanos habían prometido someterle; pero la cremallera no aguantó su peso mucho tiempo y lo dejó varado en medio del abucheo general que él agradeció con reverencias como si fuera la pompa prometida

 




Es un consuelo ver 

cómo sigue colgando del respaldo recto de una silla

ese viejo gabán, batín o guardapolvo que ya nadie se pone,

varios observadores lo notaron, alguien incluso reflexionó sobre ello

pero su reflexión quedó colgando como el viejo gabán, batín

                                                                                 o guardapolvo,

y ahora es divertido comprobar la coincidencia de algo inusual

que a todos nos molesta, nos incomoda o nos deja del todo indiferentes,

aunque ninguno de los observadores elija el mismo verbo

para indicar en qué reside la incomodidad,

algunos hasta se divierten haciendo bromas con el mono

que un bedel de museo dejó colgado en la pared

al lado de un collage de vanguardia,

(la realidad sólo con realidad se contradice).

domingo, 3 de septiembre de 2023

Por ahí anda la muerte, caliente aún con lo que ha podido arrebatarle a algún cadáver; busca algo brillante donde mirarse, quiere sentirse joven, ella que no nació, que estuvo siempre en paralelo buscando indecisiones, tratando de entablar conversación para que alguien le explique cual es el color exacto de la vida, si es que a la vida a estas alturas le queda aún algo de color

 




El conocimiento se aproxima con maneras de mendigo,

saber de las cosas es como nacer, 

se toca de nuevo la corteza, flexible y húmeda,

y se investiga en el entorno para encontrarle un nombre,

una vez bautizada se le dota de un disfraz 

para que pueda escoger su propia vida,

varas verdes de sol en el camino, hojas de acebo

bajo el brillo de las bolitas rojas, esa será la escarapela 

distintiva del gremio, lo propio siempre es diferente

aunque coincida en el formato de gota de agua,

luego se organiza el grupo, se bifurca varias veces

hasta la disolución  y entonces

se sabe de verdad lo que contiene en su interior,

(tardía recompensa por la tolerancia

a las caricias de una mano materna

que quería hacerla residir en un papel pequeño

como una letra huérfana).


sábado, 2 de septiembre de 2023

Se sintió perro de repente, le atraía el espesor de la maleza donde la vida hierve, quedarse quieto y sorprender el movimiento de la pieza, tumbarse a disfrutar el frescor de la hierba en el verano o desparramarse de barriga sobre el asfalto caliente cuando el otoño empezaba a refrescar; ahora se sentía manantial y notaba cómo su energía se iba filtrando por la tierra hasta que el sueño le dejaba reducido a un ovillo de lana reciclada

 




En la breve

nomenclatura de ellos era eso: flor,

espina de cardencha con su arquitectura de vanguardia, 

ideal para aguantar el frío con elegancia estoica,

allí vivían a destiempo su indigencia ermitaña

con la consolación prestada por unas gotas de dolor

en dosis homeopáticas alentadas por el pulso pausado de la ascesis

y los rizos del humo gregoriano,

cualquier ruido no regular era tenido por blasfemia

salvo el rosario de azabache que los grillos nocturnos

hacían coincidir con los maitines, minutos antes

de la primera lágrima del sol,

su ciclo térmico abarcaba sólo de doce a doce,

el resto de las horas se encurtía entre el dolor y la ataraxia

hasta que sonaba la campana.


viernes, 1 de septiembre de 2023

A un jarrón desnudo le pueden nacer flores, no por afanoso empeño de jardinería o por el aporte mercenario de unas flores de estación; hasta su cerámica irán llegando los colores del barro, el poder modificado de los óxidos y la voluntad de unos pinceles irreverentes que no aceptan otra realidad que la que impone el sueño

 




Cualquier silencio,

no la ausencia de voz en el mirar 

ni la blancura en el mensaje,

esa ondulación temblona, los dedos en el agua,

la atemperada forma de llegar hasta la orilla

como un círculo ciego que se adueña de todo el lago

y lo convierte en conversación, en un paréntesis

de condicionales que progresan como las edades de la luna,

lo  nuevo está en la nada, los inicios son curvos

y lo redondo es plenitud, 

todo silencio igual que la enseñanza de los sabios:

mirarlo todo con los ojos cerrados y sin voz.