sábado, 16 de septiembre de 2023

La contemplación de la papelera llena de hojas arrugadas le hacía sentir bien; tal vez alguna idea brillante acabara así, como algunos días del verano acaban en minúsculo aguacero o en oscuridad rasgada por tímidos relámpagos; del mismo anzuelo que mostrara una lombriz puede acabar colgando una captura capaz de hacer morir de envidia al mismo Hemingway

 




Oigo esa música donde el dolor gotea

como una baba sucia, le dan ese color de cieno

porque saben que triunfa,

gruñe por lo bajo su dolor, se asoma y no saluda

como si algo elemental le avergonzara, 

no es necesario mostrar una exquisita educación

ni estar bien afeitado o parecerse 

a ese retrato apócrifo de niño santo, sólo es preciso

hablar despacio, arrastrar los pies con chanclas

y calcetines arrugados, decir: la vida no me trata

demasiado bien, pero tampoco estoy seguro

de cómo debería ser tratado,

nadie tiene la culpa de este destierro

en el que soy tan infeliz como en cualquier otro territorio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario