jueves, 30 de septiembre de 2021

Cualquier poema encabritado


La sangre nunca ha de llegar aquí,

aunque cualquier poema encabritado

podría alcanzar cotas más altas,


cuando todo pase sólo se recordará

la línea oscura de la inundación

o, a lo sumo, las salpicaduras 

del propósito oculto,


sobrevivirá lo que se diga,

todo lo demás, lo embalsamado en el silencio,

será materia de futuros estudios

o de elucubración para poetas,


aunque debemos admitir

que también el tiempo escribe

de forma torpe en los poemas

de autor desconocido, restaurando

la tinta diluida por la antigüedad.

miércoles, 29 de septiembre de 2021

También de huevo nace el mundo

 


Todo ese mundo

que el sol ha ido pintando en los aleros

protegidos del aire necesita

una cuerda de la que colgarse,


si no vendrá la lluvia

e irá borrándolo, lo mismo

que hace con los nidos de las golondrinas

cuando ya la primavera se ha echado a volar,


también de huevo nace el mundo

rompiendo cascarón, abriendo

más tarde los ojos, desnudo aún de plumas,

incapaz de volar, pero en el aire,


o protegido de él, debajo

de la pluma pequeña de un ave común,

de bastarda crianza, aunque adoptado

como la mayoría de nosotros.

martes, 28 de septiembre de 2021

Las plumas que no sirven para volar siguen flotando solas


Vuelvo aquí empujado por el viento,

el roce y el arrastre me han hecho transparente,

borrando el colorido de mi tozudez,


la gravedad ya no me empuja

como a las manzanas hacia abajo 

y los pájaros me atraviesan en su vuelo,


las heridas de la memoria ya no sangran

pero ungen con vino las escamas de la sed,

me hablan de latitudes que ni el sueño 

pudo mejorar, 

                                lo lejos está cerca,

con esa mínima unidad de medida

pretendo calcular lo inabarcable,

pensarlo todo para poderlo ver.


lunes, 27 de septiembre de 2021

El balcón de galileo

 

Viene a asomarse, caprichoso,

al balcón de galileo, en la mano trae

el agua, los hilos transparentes 

con que la regadera cose las heridas

simuladas de la realidad,

ella siempre intenta parecer dormida

aunque nunca deje de mover

su conciencia de gatito lactante,


él no sabe que asomarse

es cruzar la tabla podrida de las apariencias

y quedar expuesto

a vértigo y apuesta como el péndulo

oscilante de la fe que afirma y niega

con igual firmeza ambos extremos,


ha jugado a cultivar la llama

del geranio inquisidor y las celestes

flores de un cadalso que te obliga

a caminar sobre el abismo,


pero las manos siguen amarrando sus zarcillos

a la seguridad de la baranda.

domingo, 26 de septiembre de 2021

Echar cuentas

 

Este es

el lado más difícil, este lado

sin apenas memoria que no recuerda 

los límites a los que debe someterse,


lo joven aún no ve

el lado yermo y sin medida

que parece lo viejo, aunque si se dobla

sobre sí mismo casi siempre

coincide en extensión, salvo las mermas

que la erosión del roce va mordiendo

en los laterales del recuerdo,


pero se observará

que lo mucho es poco si a la puerta llama

la casualidad, con su disfraz de invierno,


en ese caso no procede 

sucederse a sí mismo como cuando 

la juventud echaba cuentas.

sábado, 25 de septiembre de 2021

Caparazones de crisálida

 

        (punto de fuga con Leopardi)


No busquemos más,

si como se dijo "la felicidad

es lo que tenemos antes

de empezar a buscarla"

cualquier tiempo empleado en descubrirla

será tiempo perdido,

mejor fiarlo a la redundancia

de esos objetos familiares

que nos ablandan las aristas de la realidad,

será el humo del fuego, la gota

de la lluvia o la ráfaga 

deshilachada de la brisa,

algo fugaz que se confunde

con la dulzura de lo viejo

pero que no supimos saborear 

cuando era joven y agridulce.

viernes, 24 de septiembre de 2021

Tiempo de cigüeñas


Él se acordaba de la escuela,

era en los cincuenta, con las puertas

atrancadas por fuera y la libertad de la cigüeña 

robándonos el aire a cada cuarto,

cualquier argucia del maestro 

producía escozor, tristes batallas

de sangre embotellada

para estercolar en seco los barbechos,

los días desfilaban por el patio sin hierba 

y algunos se quedaban enredados en las zarzas

de la memoria, sonriendo con algo semejante 

a una complicidad sin compromiso,

todo esto está grabado, la confianza

en algo familiar trataba de curar heridas, 


pero qué producía aquel dolor

tan duradero e irremediable?




jueves, 23 de septiembre de 2021

A veces

  

             

   (con el sentir de Jon Kalman Stefánsson)


"A veces

los poemas más grandes y profundos

no son más que palabras inútiles

tiradas sobre un papel",

pero también puede ocurrir

que las palabras se coronen

con el rubí de una infantil vergüenza

y luego se desangren como las amapolas

de los pecados cometidos por la imaginación,

la tierra las acoge como siembra benéfica,

inútil como el canto de los pájaros,

tan necesaria como el aire.


miércoles, 22 de septiembre de 2021

Un relato sin concluir

 

En ese punto del relato

calló la voz y en su silencio

se oyó el crujir de los peldaños

por los que los personajes ascendían

al escenario del desván,


en las barandillas permanecen 

las últimas palabras, una de ellas

partida en dos por la cuchilla

del marcador de página,


pensé en el corazón de la granada,

silencioso, crujiente, innumerable

como los episodios de la historia.

martes, 21 de septiembre de 2021

Reuniendo pájaros dispersos


No siempre es fácil

lograr que los sucesos paralelos

quieran coincidir con la memoria

y sumarse a la vida como figurantes,


la little boy, el armisticio, la desnudez del hambre

dando ladridos en la radio, las sirenas

de bipolar aullido-aviso-admonición

o los olores sin desmenuzar del desinfectante

para neutralizar traidores sacudían 

como seísmos habituales los calmosos tedios de la necesidad,


las huellas doctrinales siempre acaban curando

pero la fe perdura envuelta en pus

para que el músculo no sufra 

la tentación de adormilarse,


dime, en qué cama duermes hoy, 

habrá cuento, sopa caliente o sólo

un buenas noches susurrado por el viento?


recuerdo aquel avión que se estrelló en los prados

con estertor de buitre terminal,

dejando en la comarca un fuerte olor a óxido

que tardaron meses en borrar los chatarreros,

más interesados en el arte de volar

-siguiendo el angélico acimut de hilos de cobre

en los ovillos de inducido- 

que en secar las entrañas de aquel pájaro muerto

para llevarlas al mercado,


tal vez por eso cada mañana regresaba el sol.


lunes, 20 de septiembre de 2021

No lo digo yo

 

                 (coincidir oscuro con Wallace Stevens)   


No lo digo yo, alguien lo afirma:

"es como si ser fuera ser observado,

como si, entre los posibles propósitos

de lo que uno ve, el que primero está,

la superficie, fuera el propósito de ser visto",

nos quedará tras esa superficie

algo parecido a un poso de café, acaso el negro

de un pensamiento elaborado a mano

sobre una superficie de papel,

eso que cualquier dibujo anuncia

antes incluso de enristrar el lápiz,

un boceto lunar cosido al cielo

por puntitos de luz, del mismo modo

que las estrellas cosen el azul

cuando al final del día cae rendido,


tal vez así pareceríamos reales.

domingo, 19 de septiembre de 2021

de predicadores diferentes

 

1 -vuelve la página y escucha

el ruido del papel, 2 -una palabra

puede ser blanca y silenciosa

como hoja de cuchillo,

3 -la hoja de cuchillo

puede entrar y salir sin ser notada

hasta que la herida impone su color,

4 -una de ellas (?) 

puede mover el aire, no montañas,

5 -para eso está la fe y la disciplina

redonda de la noria, 

5b -si persistes

en el circular embuste tal vez saques 

húmedas promesas, pero nunca el agua

que hace olvidarse de la sed,


(todo esto -1 2 3 4 5 5b-

habrás de oírlo muchas veces

y a predicadores diferentes). 





sábado, 18 de septiembre de 2021

Los días veloces

 

También septiembre es amarillo,

con su temblor de avispa merodeadora

busca el complemento del color,

esa proteína estampada en el parabrisas

de los días veloces,

si ahora miras por la ventana

verás que los gorriones 

regresan al amparo familiar,

ellos conocen

el ritual del mantel que se sacude

con las miguitas desprendidas

del pan del desayuno,

como septiembre esperan

la misericordia estacional.

viernes, 17 de septiembre de 2021

Playa de berria (de memoria)

 


Me propongo un paseo imaginario

por la lunar playa de berria

partiendo desde el lado del penal,

sumándome al ojeo que los presos

hacen de la libertad inmóvil de los barcos

que van hacia el oeste,

trato de imaginarlo,  pero ellos

enseguida sucumben a la duda 

cuando el barco es tragado por la niebla,

dudan del sol y de la luz y de las horas

en que le es permitido a la mirada navegar

sobre la ingravidez de las gaviotas,

la marea borra sin querer las huellas

de la esperanza y las dispersa

como huesos de jibia 

por el frío arenal mientras el aire va marcando

los límites borrosos

de un bienestar teñido de dolor.

jueves, 16 de septiembre de 2021

Días hacia el final del verano

 

Con el lápiz aprendí a leer,

me hice a un lado para que la luz

pudiera dar los buenos días,


qué tranquilidad cuando notamos

que el sol se siente a gusto con nosotros

apurando las horas como si fuera un familiar

que viene de visita y no le cuesta

mantener la pose unos minutos,


cuando en la paleta 

empezó a secarse el color rojo

el sol se levantó y nos dijo adiós,

pero nos aseguró que volvería 

cualquier mañana de estas,

en cuanto le llegara

el olor a café por la ventana.

miércoles, 15 de septiembre de 2021

allí donde cayó la luz

 

Voltead esa campana con la respuesta:

"hay mucha culpa

enterrada bajo la inocencia

de los días de otoño",

yo tranquilo, con mis paseos

de micológica apariencia, cuando en realidad

yo busco sangre, huellas en la tierra roja

frente a la arcangélica proclama 

de los heraldos de la noche

que se resisten a decir su nombre,


ellos no luchan con el sol, pero sufren luto

mientras aguardan las primeras notas

de un kikirikí de plata,

dadme noticia, que esa

pesadilla de la hojarasca legendaria

se quede en fábula y se lea

traducida por nuestros escolares

al lenguaje común que ya no tiembla

con las marcas dejadas por las balas en la mampostería

del paredón donde cayó la luz acribillada.

martes, 14 de septiembre de 2021

Queda tiempo, pero no sé qué hacer con él




Quisiera renunciar a la memoria

para no sufrir,


me dije: queda tiempo,

pero no sé qué hacer con él,


si cultivar semillas vivas

hundiendo su esperanza en las entrañas

oscuras de la tierra 

y esperar a ver qué pasa,


si centrarme

en la contemplación furtiva de la luz

imitando a los pájaros nocturnos

que intentan conocer a sus contrarios,


o dedicar el resto

al forjado del alma que se dobla

como caña agitada por el viento.

lunes, 13 de septiembre de 2021

Relato del desfallecimiento

 

Se me doblaron las rodillas

como en una liturgia de cartón,

la tierra me acogió por un momento

y me susurró al oído: aún te quedan

por aprender muchas más cosas, debes

templar el triste acero de la memoria,

reconocer en el espejo

el nuevo tono gris de tu semblante, 

gobernar tus pasos

sin que la prisa te fatigue

y te impida ver la transparencia

de los días escritos a buril.

domingo, 12 de septiembre de 2021

Del soñar inverosímil

 

Soñé con una columnata,

arriba ondeaba el lábaro del papa, 

por las ventanas asomaba

la ausencia perfumada de un ejército de monjas,

todas en silencio, como las golondrinas de cerámica

que sobrevuelan las paredes inútilmente blancas

del dormitorio principal, a un lado destacaban

el aspa de san andrés, las llaves amarillas 

festoneadas por cordones de oro, casi

un simulacro de dogal o persuasivo látigo,

y ángeles encima,

innumerables ángeles cantando con sordina

como pretendiendo ser los guardianes estúpidos el sueño,


dime, arúspice, cuántas palomas han de ser sacrificadas

para que de aquí pueda salir el humo blanco

que tiene a roma sometida al síndrome 

de las piernas nerviosas,


(yo no quemo grasa en los altares 

porque nunca entendí la química

que de la púrpura de tanto cardenal

extrae el blanco aislado de una sola sotana

para que sobrevuele la plaza de san pedro

recogiendo el aplauso del teatro).

sábado, 11 de septiembre de 2021

Las lecturas cruzadas



             (vuelven a madrid las letras como lluvia)


Un libro de tapa dura ha arraigado en mis manos,

ellas le sostienen con flojera,

con el desmayado mimo de la perplejidad,


la pared contempla la impaciencia de los dedos

que siguen entreabriendo páginas

en busca de la herida y de la venda,


por esa herida se desangra el vértigo

y el consiguiente miedo a una caída

que arruinaría las cuidadas líneas 

de su encuadernación y haría peligrar la peripecia

sin conclusión de la lectura,


que alguien le ponga título y consiga

llegar hasta el final,

hasta el cascabel de la serpiente.




viernes, 10 de septiembre de 2021

El lado tonto de la primavera

 

Cuando el cuco pone el huevo en nido ajeno

alguien podría dudar de su sentido maternal,

pero es que el lado tonto de la primavera

le invita a celebrar el triunfo

de la fertilidad sin despojarse

del tic repetitivo de su canto,

en cambio al otro lado la curruca

planifica los tiempos de empollar

y de cosechar el alimento

en el silo insaciable del gran hijo

que la naturaleza despistada

le regalará un mal día

como compensación a su tamaño.

jueves, 9 de septiembre de 2021

Aunque vuelvas la cabeza seguirás mirando al frente

 


Alzo el dedo y afirmo mi presencia,

cualquier palabra puede demostrar que estoy aquí

debajo de protectoras vestimentas,

amparado en la turbiedad de este amniótico envoltorio

que va gestándome,

cualquier asentimiento

es como el cabeceo de las flores

ante el saludo de la brisa,

luego quizás no tenga una palabra que decir

y regrese al útero benigno del silencio,


no estaré convencido

pero podré apostar por el futuro.

miércoles, 8 de septiembre de 2021

Una sonrisa

 


La no alegría es lo que guarda en la nevera

esta fotografía,

se nos ordenó que sonriéramos

ante la amenaza del disparador,

decir patata ya no sirve

para pixelar un gozo que ha entrado en reserva,

somos una proteína que desvela

con su mímica torpe el núcleo duro

de la ferocidad dental, del esqueleto

insobornable a los vaivenes de la carne,

y de él es la sonrisa que perdura

cuando nadie se acuerda de nosotros.


martes, 7 de septiembre de 2021

Coro de ángeles

 

Con cuántas alas cuenta

la cuerda del soprano, ahora

que el místico cordero languidece

entre alambradas y de su lana sucia

más que armonía brota sangre,

el coro esconde su dolor de ahora

entre virtuosismos del barroco

de bach o de van eyck,

y mientras las mejillas de los ángeles 

hinchadas como ubres holandesas se encaraman

al do de pecho, en los campamentos

de refugiados suena a lata

con óxido y orín el hambre antigua

de los desheredados de la tierra.

lunes, 6 de septiembre de 2021

Siempre en mi ausencia



Sí, he de admitir

que todas las cosas memorables suceden en mi ausencia,

me doy la vuelta y todas las luces se convocan 

para ofrecer un escenario

con la minucia iluminada de un ceremonial antiguo,

en cambio yo, conmigo como único ocupante,

he de mendigar noticia sobre mis horas muertas

y fiarme de la interpretación de signos no muy claros

a cargo de alguien cuya voluntad y facultades

declinan más deprisa que mi pasión por seguir viendo

el espectáculo del mundo.

domingo, 5 de septiembre de 2021

La pose

 

Recojo los añicos cerámicos de la fotografía,

antes tus ojos relucían

con el esmalte loco de la juventud,

la eternidad unía los extremos de un solo momento 

en el óvalo amarillento del daguerrotipo,

tú te preparabas

para que el cemento aéreo de la pose

perdurara en el tiempo

como los posos del café,

como las entrañas de la víctima,

igual que la arenisca

a la que el viento roba la viveza

de su perfil más cincelado.

sábado, 4 de septiembre de 2021

Hermosos pobladores de la imaginación

 

Hermosos pobladores de la imaginación,

tomaré la pluma

para dibujar vuestro perfil, 

una sonrisa sin rostro al que asomarse

dura menos que la alegría bautizada

con nombre propio y aunque caliente poco

su llama brillará sobre la lluvia y los vendavales,

vosotros sois el agua, no la sal, vosotros

en cuya construcción no ha concurrido

ni una solo rastro de ingenio evolutivo,

que habéis crecido en la carcasa

robada a las crisálidas antiguas,

se os regó de aceite y vino

como a los huesos de los muertos

y ahora se os permite el colofón del canto,

a vosotras, criaturas silenciosas

nacidas para despertar el hambre

en los empachados por la realidad.


viernes, 3 de septiembre de 2021

Apolo contra marsias (la crónica)

 


Hasta el lugar se ignora donde la partida se jugó, 

las actas ardieron en el ara entre sabrosa grasa de carnero,

lo que agradó a los dioses, hartos del menú vegano

que minerva había impuesto por despecho,


de qué está hecha la gloria

pudiera haber sido el titular, pero las alas 

de las ángeles laicos de la pista se plegaron

antes de tiempo, dejando todo en la oscuridad

entre el aplauso de algunos mercenarios que portaban 

pañuelos rojos como único indumento, 

nadie esperó a la entrega de la ensaladera

pues fuera el espectáculo se tiño de sangre

quirúrgica que un preciso bisturí

fabricado con las cuerdas de la lira

administraba sabiamente

como reproduciendo aquella escena

que shakespeare imaginó para burlar a shylock,



jueves, 2 de septiembre de 2021

Apolo contra marsias, (último cuarto)

 

Por la tarde 

nos encaminábamos al lado norte

de la colina, tumbados en el suelo

nuestras cabezas asomaban al abismo,

no pretendas decidir, es el destino quien decide,


qué azul puede llegar a ser la paz 

cuando viene de lejos y subiendo,

todos conocíamos la letra

tarareada en la escuela, pero nadie 

sabía traducir y dar color al acertijo

que nos llegaba desde abajo

con un vaho de desolladero

que casi nos hacía vomitar,

pero la tensión del mito

conseguía imponerse hasta que la nausea

se aquietaba con la promesa

de los arándanos azules 

que premiarían nuestro esfuerzo

antes de volver a casa,

este no es el camino, probad, 

probad con la misericordia a ver qué pasa,


(tampoco aquí esperaba sufrimiento

ni derrota o muerte, tras la llegada del silencio),


pero tras el tiempo muerto, unos segundo de suspense

y nada de apolo, nada de misericordia o toque

de gloria como cuando muere un niño

por nadie sabe qué, la piel enjuta

cuelga ahora de las ramas

con su olor a orín, con dolor, sin música

y su semejanza a los despojos que los lobos

abandonan en la hierba tras teñirse 

de sangre y de silencio, sin balidos

ni ladridos de perro,

ni siquiera el cuerno del pastor

dando color al episodio o un jurado neutral

para guardar las apariencias,

sólo esa bruma gris y ese olor punzante

a página interior de florilegio,

eso, eso es 

lo que tendréis que traducir del griego,

no lo que todos conocemos.

miércoles, 1 de septiembre de 2021

Apolo contra marsias, (tercer cuarto)



Es más sabio

el labio austero que se entrena

chupando regaliz o la agilísima

nomenclatura de los dedos escalando

agujeros sin trastes en romerías pueblerinas

para gobernar el púlpito del aire?


en este cuarto no esperaba ni sufrir ni morir,

sus labios no sentían la sequedad del miedo 

sino el húmedo impulso de la creación, 

el marcador sigue sumando

rodales de humo, y aunque permanezcan

las marcas inequívocas a este lado

del pasillo de dobles no será suficiente

para hacer bajar de su arbitraria silla al dúctil midas,

silva el espacio con temblor de abeja

y la melodía principal se enrosca

como glicinia entre la cal, 


el tiempo muerto no consigue 

que el agónico grito del entrenador corrija

la apatía del guarismo,

la bocina siempre llega antes, nos fundimos

entre el descontento del gentío, con el dolor de cuello

que da el esfuerzo por lograr un ace

que para el juez será segundo saque,

quizás todo el misterio se resuma en esto:

los ojos dan color a lo que miran, 


(marsias recordó que aquella flauta

la encontró en el suelo como si fuera un áspid

de los que caen desde el olimpo

en las noches de farra de los dioses).