lunes, 31 de enero de 2022

En esas garras

 


Silba el águila,

de sus garras cuelga un recental 

como un antojo

de deshilachada oscuridad contra el azul del cielo,

el palpitante miedo

convertido en remedio contra el hambre,

el águila lo sabe, aunque no se interesa

por el nombre de especies inocentes,

llegará volando, excitará la gula de su prole

con un último círculo innecesario, 

su grito chocará contra el cantil 

con sonido de flecha y una gota

de sangre muy caliente

resbalará por la caliza hasta llegar al nido

donde un pequeño monstruo desespera

agitando sus alas harapientas.

domingo, 30 de enero de 2022

Contra sortilegio

 



Puede el sortilegio

urdido en un idioma desigual

hacer morir el alma

de quien no entiende la cercanía de la muerte?

y si así fuera

cómo desactivar el mecanismo

para convivir con las palabras

de venenos activos

sin necesidad de traducción.

sábado, 29 de enero de 2022

Óxido

 


También sobre la llama 

brillante del acero anida el óxido,

salvo que sol y acero se decidan

a hacer causa común frente el avance

roñoso de la muerte. 

viernes, 28 de enero de 2022

Sobre varias lagunas

 



Sobre varias lagunas

ha caído el agua de esa nube,

allí se mezclan las dos aguas y fermenta

una transparencia con color que busca

volver al aire en otro idioma,

observa bien, del cuerpo

puede esperarse descendencia,

del alma no.

martes, 25 de enero de 2022

Con el sonido me conformo

 


Tan sólo hay que poner al lado

la traducción del tintineo de la loza,

de mil arroyos se compone

el arqueológico danubio de esa lengua,

se ha de procurar que no salte el esmaltado

con la tela de araña de la edad, 

será un sonido entre algodones, y suena así

porque se escribe con trozos aguzados de cerámica

organizados en hiladas

sobre un aglutinante coloquial,

el verbo

llega con su raíz hasta la tierra

de los tensidones, donde Homero

pinta en rojo una escena fúnebre 

sobre el ánfora que guarda las cenizas de Ilión.


(hace tiempo puse letra a un rumor, sonaba como el roce fluvial de las piedrecitas desgastadas del río cuando se hacen pasar en chorro de una mano a otra, pudo ser así o muy distinto, entre pulido e informal:

incununata cu flori de mac, 

ciocnindu-mâ de fluteri muribunzi,

inaintez

prin somnul numit de mine

noiembrie.../...

pero hubo oídos que empezaron a sangrar y cerraron la luz con un portazo, seguro que tendrían razón aunque os puedo asegurar que no era lo mismo que masticar arena, probad y lo veréis).


lunes, 24 de enero de 2022

Imagina

 



Imagina el destrozo

que produciría una falange

de hoplitas susurrando

todos a una la consigna

que les han vertido en la cazuela

común del desayuno.

domingo, 23 de enero de 2022

Mirar por la ventana



Mirar por la ventana mientras la nieve cae, 

el frío no se ve pero se eleva sobre dunas de nieve iluminada, 

un solo gorrión para tanta blancura, 

las campanas proclaman su afonía conventual, sin eco, 

como flechas que regresan del aire sin paloma,

verticales e inútiles, 

pero satisfechas de no manchar de sangre 

el mantel extendido

para ocultar tanta miseria.


sábado, 22 de enero de 2022

Compárate con algo

 


Compárate con algo,

compárate con el olor a humo

que contempla el incendio desde arriba,

con la herida no, con el calor activo 

que sucede en el aire

pero recorre los anillos de edad con que los árboles

se hacen fuertes frente al capricho de los hombres,

no es lo mismo madera que ceniza, 

entre ellas ha mediado 

la ordalía semántica del fuego

y ya viven en mundos diferentes,

compárate con el aceite

que es sangre emancipada, o con el lino virgen,

él hará sensible el tacto de la ropa

sobre tu desnudez que irá durmiéndose

al mismo tiempo que la luz, un día cualquiera.



viernes, 21 de enero de 2022

Ayudando a nacer a las palabras

 



Me habían regalado aquel juguete

que eructaba palabras de metal,

yo jugaba a enterrar entre vapores

una voz azulada por la ansia

sin atreverme a preguntar de dónde

venía o hacia dónde iba aquel sonido,

su corazón de muelle 

pugnaba por salir catapultado

de su cámara lenta, y mis oídos 

con misericorde cirugía 

le hicieron una mística cesárea

al anestesiado  mecanismo.


jueves, 20 de enero de 2022

Inadvertidamente

 


Inadvertidamente

voy dejando mis temores por ahí,

mis gafas, las ventanas abiertas de algún libro,

la memoria o los posos ya fríos del café,

sin pensar que alguno puede jugar él solo como arúspice

a desentrañar el blanco oculto de las cosas,

prometo corregirme, un poco más 

y todo volverá a ser como al principio

deshabitado y simple, sin misterios

ni paradojas opinables, como un agua

que busca siempre la litera

de abajo, la más fácil de ocupar.


(la infancia escoge sus lugares

como si fueran flores reversibles

porque sabe que en ellas la ternura

puede cambiar de lado).

miércoles, 19 de enero de 2022

El lado monstruo



 Sí, disfruto acariciando mentalmente 

la declinación accidentada de tus vértebras,

tu lado monstruo que envejece y se amotina 

contra la infancia armónica,

un alma roja de perfil,

la seda vermis de tus alas,

tus adornos agudos anunciando

una bondad de cuarzo no del todo transparente,

bajo una gorra de beisbol mitológico 

se insinúa en racimo tu pelo enharinado, 

un grumo inteligente casi al ras aéreo de la parra,

sin pulgón,

con enfermedades que podrían curarse a golpe de cincel, 

como sucede con el mármol. 


Entenderás mis dudas, 

pero sigo soñando que algún día

pulsaré tus escamas como teclas de un piano sin sonido

y volveré a vivir tu antigüedad.


martes, 18 de enero de 2022

Egos de oro y de latón

 

Flotando sobre el vaho

maduro de la estética

hoy me pregunto, mientras doro

un faisán bravío en la cocotte:

es mejor que el oro venga

asociado al placer o que se ajuste

el canon académico,                                

                                      tal vez los siglos 

no lleguen a captar el tibio aroma del asado

pero verán con ojos satisfechos

cómo se dora el horizonte 

al margen de los cánones y el hambre.


lunes, 17 de enero de 2022

Sin voz

 

En las mañanas del invierno

observas la resina de la luz

goteando desde el cielo 

como si el sol viviera en los botones

dorados de tu uniforme de escolar,

te acompaña la sombra,

esa toga de oficio que defiende

la hospitalidad helada de los ángulos,

suavemente te empuja hacia el rigor del patio,

y allí te deja solo

tecleando el sordomudo braille de la luz

para que empieces a entender el mundo.

domingo, 16 de enero de 2022

Llamar jardín a esto

 


Llamar jardín a esto

que se amontona agreste

bajo el mástil blanco de los abedules,

entre croar de ranas

y el progresivo anillo circular

que provocan los patos cuando miden

la plata ennegrecida de la charca,

un agua casi azul que también copia

las nubes y las hierbas de la orilla

para hacernos creer que todo cabe

en esta realidad tan reducida.

sábado, 15 de enero de 2022

Frontón

 

Él arriesgaba, 

a punto siempre de rozar la línea baja,

no buscaba la verdad sino saber si había

tiempo aún para seguir flotando

en la incontinencia de la duda

antes del final de la partida, la mano hinchada

como pala de hornear el pan,

-y tú qué miras-, 

poca alegría queda ya, -ahora ni se juega-, la suple

el poso del esfuerzo que se quedó sin agua

de tanto hervir,

pero seguimos a la espera triangulando 

esta virtual hipotenusa del frontón

para que el eco nos devuelva

las resonantes carcajadas

que provoca el encuentro

de la ansiedad con la pared.

viernes, 14 de enero de 2022

En el sueño se mezclaba todo

 

Los aros de cebolla

flotando en la sartén, a punto

de alcanzar el grado tosco de dorado

que la receta proponía,

por la ventana entraba el aire

dividiendo en dos la luz de la cocina,

el frío y el calor, el olor acre del aceite

y el puntiagudo oxígeno

del anochecer con hambre,

                                              enero estaba

ya medio desnudo y los minutos 

ganados a la sombra empezaban a notarse,

por qué soñar con algo tan lejano como un lago de luz

si en las horas más cerradas del sueño

se me quedan los ojos tan abiertos

que hasta el negro de la habitación juega a vestirse

con un color extraño para el luto. 

jueves, 13 de enero de 2022

Con niebla en el barrio alto

 



Párate a mirar

ese milagro luminoso de los adoquines

mojados con vapor de agua marina,

sobre ellos arde el fuego de la sal

y en el pulido lomo de la piedra

queda una escoria moribunda

que la avaricia de los hombres

confunde con el brillo de las perlas,

no caigas tú también en esa trampa,

limítate a seguirlos

con la fidelidad de los tranvías

hasta la estación final.


miércoles, 12 de enero de 2022

Mira hacia afuera

 

El mar es casi blanco junto al rompeolas,

el cielo junta con el mar su color pálido

y las gaviotas de un pulido ceniciento

acentúan la ingravidez de la mañana.


Qué bien que el mundo flote

y no se ponga tan pesado

como la pelota de trapo que los niños

hacen rodar sobre la arena

a base de patadas y alegría.

martes, 11 de enero de 2022

Catálogo mudo de canciones

 


Las últimas notas siguen en el aire,

no es tu mejor canción, acaso por la letra,

tampoco los vapores musicales

al condensarse en la mampara de la ducha,

y tú no es que nacieras para el canto,

tal vez para ir acompañando con los ojos

los puntos fríos y calientes

que hacen progresar el magnetismo 

del sonido reptante -¡la culebra!-,

yo soy el ratón y miro hipnotizado el amarillo

que propagan los ojos del ofidio universal, 

no es necesario traducirlo, ese imán seguirá sonando 

como el estruendo quieto de los pájaros 

en las horas de la siesta,

o como las cuentas de un collar rodando por el suelo,

o como el roce de las gomas sobre la banda negra del asfalto,

o acaso como el gozne de una puerta medieval,

o como el zas del hacha sobre el cuello,  

o como el banu acaz del ápora, 

o como...

-a pesar de todo será un éxito-.

lunes, 10 de enero de 2022

En el mes de los náufragos

 


He acudido

hasta la repisa del acantilado

trayendo de la mano las figuras

de mis manes tallados en madera,

las olas multiplican su chasquido

a modo de oración y hasta aquí llega

el efecto arco iris de las gotas

emancipadas del vapor,

con las gaviotas la mirada escapa

hacia las aguas sucias de azul y de caloca,

quiera el destino dibujar en piedra

estos pensamientos, con vosotros lejos

y la paz huida entre gaviotas,

aunque yo haya venido solamente

a comprobar los grados de la fiebre

que aún palpita en vuestras almas.

domingo, 9 de enero de 2022

Una instantánea

 


Sé que no es esa la pregunta,

pero todo apunta a que el viento de marzo no trae flores

y que en esta etapa del pensar

crecen en la frente las arrugas

del razonamiento relajado en clara apuesta por la antítesis,

los ojos tienden a bizquear tras la ranura

del obturador y ajustan con rigor un objetivo

tan nítido y seguro como borrosa es la vejez.

sábado, 8 de enero de 2022

Como azabache de algún dios

 



Ahí llega el escarabajo egipcio,

su mancha avanza en diagonal sobre los poros

estremecidos de la repugnancia,

entrará en el secreto no coloreado de la sangre

con la indiferencia de quien pisa un territorio

que no le pertenece, él no sabe, 

ni le importa saber lo que molesta su presencia,

en la penumbra encuentra su bienestar incómodo,

no precisa de comodidad su piel armada de charol

y el azabache enciende el bermellón de su alborada,

él no se pone de perfil como los dioses

a los que devora las entrañas,

y nunca deja huella

porque sus patas hacen cosquillas a la arena

y esta se precipita como risa

desde la alta duna de su indiferencia,

(todo camuflado entre señales 

que le robó el siroco a la arenisca).





viernes, 7 de enero de 2022

Fin de fiesta

 


Al terminar la fiesta

en el pabellón sin luces hubo

un momento de gloria,

del alto techo con nervaduras de acero bermellón 

colgaban las guirnaldas aldeanas

de una felicidad tan pisoteada

que parecía un excremento de trituradora de papel,

sin embargo ahora, ya sin luz ni fanfarrias,

toda la soledad oscura de la carpa 

se dedicaba a la contemplación de unos adornos

que nadie vio mientras duró el festejo,

qué distinto del infinito desconsuelo

del confeti arrastrado por el viento

sin nadie amable con quien conversar.

jueves, 6 de enero de 2022

Se ha hundido el techo de la colegiata

 


El libro dice:

el pensamiento se eleva a la verdad

a través de la piedra,

del cristal obtiene la clarividencia,

vidrieras, rosetones y espejismos

habrán de colorear el negro 

corazón de los templos,

ya no habrá dioses oscuros

proyectando su peso sobre el vuelo

catecumenal de los gorriones,

la soledad brillará siempre

en los candelabros de latón, por más que arriba,

bajo los aleros de los ángeles,

siga sonando imperturbable

el llanto antifonal de la doctrina.

miércoles, 5 de enero de 2022

En el gris de esta laguna

 


Se atribuye al vidrio y a la loza 

una quietud iluminada capaz de simular entre barrotes

la sosegada muerte natural

que algún brillo fugaz desenmascara,

morandi se acercó al misterio de la cuadrícula 

enmarcada en soledad y monotonía,

puso el gris a trabajar y dejó al negro

la definición del límite,

escarbando en colores secundarios

hasta llegar al blanco posterior

sin reparar en horas de minucia y alquimia,

siglos pensando en ese balanceo

de junco solitario que asegura 

la existencia de vida al otro lado del cristal.


Aquí no existe lo sagrado

pero se deja ver alguna vez.

martes, 4 de enero de 2022

Cien años más

 


Mis ojos vivirían

cien años más

contando las intrépidas burbujas

que nacen en cadena desde el fondo

dorado de una copa de champán.

lunes, 3 de enero de 2022

La bruma digital

 


Queda muy lejos del papel esa mirada soñadora 

que sigue columpiándose sobre la bruma digital

de un siglo sin orillas,

hierven las letras y los ojos duelen

como si leyeran humo,

y el alma dónde está, qué olores

nos arrebata la pantalla, si las páginas

ya no consiguen convocar a las abejas libadoras,

el rito del papel se oficia siempre en soledad 

junto a esa fruta colorada

que se coge en sazón y dura poco

pero alimenta los sentidos

hasta la próxima cosecha.

domingo, 2 de enero de 2022

Thamus: deudas y dudas

 

                               (para quien se da de baja en la palabra)


De sus años de estudiante

quedaba apenas el humo de algún sueño:

el aire helado de la hélade le dejaba los dedos sin color 

mientras la mitad activa del cerebro

buscaba solución en el florilegio de versiones, 

platón cenaba con sus émulos

y la disertación languidecía 

a medida que el hachís iba girando,

alguien, distraído, trajo la cicuta a colación

y el tóxico dejó dormidos a los que aún no se habían atrevido 

con el vino de rodas, esperando

a la libación ritual del alba que ya no había de llegar,

la tesis resumía en un latín deforme

lo que los traductores oficiales se negaron a trasegar

de las ánforas del griego primitivo

por temor al error que precipita la falsedad de la memoria,

un dedo iba escribiendo sobre la cal de la pared

mientras el silencio amordazaba cualquier intento de conversación

en el templo civil de la palabra.


sábado, 1 de enero de 2022

2022, primeros aires

 


Cuando vieron vacía la ampolleta 

un pensamiento recorrió la sala:

había que dar la vuelta al mecanismo

para que el tiempo no se detuviera, 

pero nadie se atrevió a romper el hielo

que tras el último gránulo de arena

había congelado el corazón de todos,

siguió sonando el segundero en el silencio

y cuando ya la asfixia coloreaba

de morado los labios, alguien consiguió decir:

no sé, pero parece que seguimos 

respirando las sobras del 21, todos se llevaron

la angustia a la garganta, se palparon la nuez

 y al ir bajando y dar la vuelta por los hombros

la manos comprobaron con espanto 

que las alas no habían vuelto a florecer.