viernes, 8 de diciembre de 2017

Del tiempo

Ya sé, mirar atrás es como darse
de bruces con un monstruo envejecido.

No es que el tiempo envejezca, sólo tiñe
de decrepitud nuestra mirada
para hacerse invisible y asestarnos
la definitiva puñalada. 


2 comentarios:

  1. Vamos a tener que cambiar de registro, me pasa lo mismo como si estuviese esperando el tiro de gracia aplaudiendo al verdugo.Al go nos enseñaron mal,o algo no aprendimos quizás vivir sin complejos.

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    1. El tiempo acaba convirtiéndose en obsesión. Y es simple cuestión de memoria. Eliminada esta, regresamos a una perpetua infancia, al presente continuo.

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