Quiero mostrar misericordia
hacia ese escarabajo
que nunca quiso alzar su voz,
su silencio de tonos irisados
habla por él, resume
siglos de arrastre sin remedio y puede
que se ría de mí reconociendo
nuestro común oficio
de empujadores cuesta arriba
de lo que siempre estuvo abajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario