miércoles, 18 de noviembre de 2020

Anticipación a la gran cortina

 


Entero invierno:

en ese corazón florecen 

lirios helados, altos

helechos de cristal, reflejos

de una luz transida que no tiene

voz y sin embargo clama

por todo el valle como 

un terciopelo susurrado,


sólo falta la liebre

que haga rodar por la pendiente

una bola de vértigo infantil para que todo

se asome al precipicio.



No hay comentarios:

Publicar un comentario