Óyeme, tiempo burlón,
no me des largas, monta
conmigo en el caballo y mira
cómo corre el paisaje.
Podemos
jugar a que no existes,
tú y yo botón y ojal en esta
camisa de fuerza que es la vida.
Luego
volverás a vestirte de quietud
y a reírte en sielncio
de esta fingida galopada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario