Dame un respiro, Bob,
voy subiendo la cuesta y no te escucho bien,
la sangre me golpea las sienes, espera, dime
en qué idioma desnudo vas a pronunciar
la próxima blasfemia, sabes que no te entiendo
pero se me eriza el bello cuando rezas
a ese dios de marfil que llevas suspendido al cuello,
la luna brilla en la pelambre de mi piel de abrigo,
se la quité al gran oso tras matarle,
él ya no respira, ahora vive de mi respiración
y dormimos juntos
y en sueños hasta gruñe, casi igual que tú,
descansa un poco, voy de caza y puede
que no a todas las bestias les gusten tus canciones,
-Eurídice abandonó el submundo tras tu música-,
pero ahora escúchame aunque no vuelvas la vista,
pongámonos de cara al viento y así tal vez mañana
tengamos algo que comer.
Zona B:
El genocida ve agresión en cualquier movimiento de defensa de quien ya no tiene nada que perder.¿Cómo ha de ver el mundo libre su continuo desprecio por la vida, la conculcación de los derechos, y la desproporción de sus operaciones "preventivas" en defensa de no se sabe qué?
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