Ha estado nevando por la noche,
en el asfalto de la calle
una cagada de caballo forma un rosetón,
la nieve se derrite en torno y sugiere formas,
sale un humo con olor a cieno o a nitrato,
en las huellas es visible hasta la marca
de las botas camperas que han pasado por aquí,
el centro acanalado de la calle divide en dos la nieve,
la orilla blanca y la manchada, este es el lado
por el que los niños fueron a la escuela,
lo protege el alero aunque de él cuelgue la amenaza
de los carámbanos azules,
se tiñe el norte y por el sur la luz se asoma,
suenan las campanadas de las once
y algo con alma de cristal se rompe, como si una piedra
hubiera sido lanzada contra la vidriera gris del cielo.
Zona B:
La Historia apunta a que ninguna forma de dominación que recurriera al exterminio de los nativos para consolidarse fue capaz de perdurar. Es muy perturbador vivir rodeado de fantasmas capaces de hacer resucitar el odio dormido tras una temporal desaparición.
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