Volando llega
la palabra del perdón,
primero fue pregunta,
se justificó regando
la acera sucia
con agua bautismal,
le puso nombre
al comunal abrevadero,
de qué sirve
ese hormigón, alma de acero,
alzado para aplacar con regocijo
la sed de todos.
quien lo deje sin agua es enemigo,
quien impida
llegar a los sedientos hasta aquí
es enemigo,
quien una vez reunidos los sedientos
en torno al manantial
los destruya con sed o con veneno
es enemigo,
quien destense la lona de la tienda
donde duerme el bebé
y consume sus horas el anciano
es enemigo,
y para el enemigo
que maltrata la vida
jamás habrá perdón.
Zona B:
Suena mal cuando unos textos religiosos tan antiguos parecen inspirar letra por letra la estrategia genocida del ejército israelí contra sus vecinos. Los habitantes de la antigua Edom (Idumea) también eran semitas.
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