jueves, 7 de abril de 2022

De Crónicas bárbaras



Ahora que el canal ya va por alto, 

con el agua cabalgando los arcos de herradura

del acueducto, nos sentimos

huérfanos de afán, sin herramienta

para azuzar a algún vecino murmurador

o al que nocturnamente

desviaba nuestro derecho de aguas

por otros derroteros, ya no somos 

la afanosa cuadrilla que soñaba

proyectos imposibles ni escuchamos

en la pausa para comer 

el graznido civil del arrendajo entre la aulaga

hilvanando concordias,

no nos dimos cuenta de que el muro

alzado en curva tiene

virtud de anfiteatro y reproduce

la más ligera brisa con aullidos de huracán,

así que, atentos con lo que se rezonga

porque ahora la herramienta está ociosa y puede

combinar su función de conductora de agua

por la más aguerrida de la sangre.



No hay comentarios:

Publicar un comentario