Cada vez que un cosa se oscurece
negándose a seguir contigo
si no es como recuerdo
un espacio diáfano se cubre de cemento glacial,
lo mismo que se cubren las celdillas
en el panal de miel, dejando apenas
esa dulzura imaginaria
de lo que no se ve pero se sabe
que sigue estando en algún lado,
de esa manera ha sucedido, permanece
un campo yermo de cemento y flores
de plástico otoñal, el suficiente
para enterrar una memoria
oscurecida por el polvo
que provocó la casa al derrumbarse.
Zona B:
Una UE que permite a los gusanos seguir matando el corazón de la manzana es un fracaso estructural y una fallida apuesta de futuro (Orban p. ej.). No es extraño que el bocazas de Trump y sus secuaces se atrevan a enfrentarse a una fachada incapaz de aguantar sus embestidas
No hay comentarios:
Publicar un comentario