Robula caudalis,
esa flor ambigua que huele mal e imita
a la serpiente escupidora,
un candor de hollín sombrea
su palidez, por eso a veces
es usada de sombrero
por los turistas nórdicos
que se enfrentan al sol como si fuera
un turista más y no un nativo
cansado de un horario laboral
sin un minuto de descanso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario