domingo, 4 de febrero de 2024

Hazme sitio en el escaño, lo han colocado en la fachada de la iglesia mirando al sur, los viejos nos citamos a las doce para ver salir a la parroquia endomingada, se irán de ronda por los bares a cumplir el precepto y alcanzar niveles de indulgencia, comentarán como nosotros la nadería semanal y pondrán cara de asombro cuando se refieran al genocidio palestino; por lo demás, sin novedad

 



Por la mañana

vino el humo de la chimenea a saludarme,

los pájaros se unieron al saludo, el viento se paró

y la veleta quedó apuntando hacia el oeste,

qué poca luz, pensaba yo, para estos días de febrero

sin nubes, sólo el frío

mantiene la apariencia de esta estación desdibujada,

no estoy de humor le dije al humo, a la veleta y a los pájaros,

mis ojos lagrimean y mis manos

necesitan un sol mayor,  y acaso una batuta

como si fueran

las de un adusto director de orquesta.



Zona B:

Con Barenboim, que hace surgir las armonías entre seres humanos a los que los gobiernos envenenan con su ambición.

No hay comentarios:

Publicar un comentario