domingo, 11 de febrero de 2024

Ya en los años secos hube de recurrir a la visión aérea para poder ponerle algún reparo al creador que presumía de ingeniero racional sobre un paisaje de latifundios caprichosos donde el color no siempre estaba bien dispuesto y las acequias se mostraban como heridas innecesarias cruzando el amarillo de los prados; tal vez su fantasía se agotó con el trabajo a medias

 





Un picado turbulento,

acaso sea el embudo de la gravedad

o la succión del suelo que se acerca vertiginosamente,

un sonido helicoidal muy parecido al rizado

que luce la espiral del adn, igualando el final con el principio,

también el aire puede enfermar, se oxida

contra la chapa de aluminio y tiembla igual que alguien con miedo,

no sólo el águila prescribe unos principios de navegación,

normas de vuelo incompatibles con el exceso de velocidad,

y esta hará que nuestros ojos

no puedan evaluar la redondez de algo tan plano

como un mapa escolar a dos colores.



Zona B:

ISARAELÍES: ¿os habéis parado a pensar en qué entretendrá sus pulsiones asesinas el gran verdugo cuando ya no queden palestinos que masacrar? 

 

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