(Para Ana, una mirada al calendario)
"las cosas que no pueden moverse
aprenden a mirar" (L. Glück)
Tengo dudas acerca del lenguaje
más conveniente para dirigirme
a las cosas que no suelen hablar,
ponerse frente al brillo del cristal
para darle la réplica,
copiar el color rojo -y en qué grado-
de las flores de campo,
o esconderse en la sombra y captar algo
de su respiración, como el jadeo cotidiano
del fatigoso día a día
que Hesíodo cantó mirando
no a la belleza sino al resultado
de siglos de silencio y eficacia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario