jueves, 25 de noviembre de 2021

Habitación de hotel

 

Dejé en la habitación mi sombra

con la prisa de quien se aleja de algo enfermo,

vagaban por allí demasiadas almas

ensombrecidas, también abandonadas

con semejante urgencia por anteriores inquilinos

como si el último en llegar fuera el más vulnerable

en el conflicto de la impunidad

frente el abandono de mascotas,

sólo por unas horas

nocturnas y con sensación de extranjería

pagué unos euros de dificultad extrema,

las monedas más duras

de mi colección de objetos desdeñables

con los que algunas veces 

me arriesgo a penetrar sin armas

en territorios enemigos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario