Vendrá de ahí lo de dichoso,
de decirle al otro, a todos lo feliz que es todo,
el sol, el agua, el aire,
lo contagiosa que es a veces la felicidad?
ellos son felices y nosotros lo vemos
y queremos que se sepa y repetirlo
una y otra vez
hasta que lo dicho sea una corriente de aire
que a todos hace falta respirar con ruido
como un feliz encuentro no previsto,
decirlo todos a la vez aunque ninguno
de nosotros se entere, lo mismo que la hora
que se mira en el reloj sin verla
porque se sabe que es así, que es esa
la hora de decir al otro, a todos, a los cuatro vientos
lo bellamente desordenado que está todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario